CAMBIA EL PLAN PERO NO CAMBIES LA META
Las mujeres de hoy creemos que podemos con todo, la impulsividad nos lleva a acometer actividades a las que nuestro cuerpo ya no responde como antes; vivimos deprisa, sin tiempo para nosotras, llenas de obligaciones dentro y fuera de casa, esclavas de listas interminables de tareas a realizar cada día, de forma mecánica.
Pero después de los “cuarentaytantos” también hay vida; aún puedes aportar mucho a los demás, compartir tus vivencias, tu experiencia y tus conocimientos y conocer a gente que, al igual que tú, busca disfrutar, aprender, compartir…
Si te consideras una mujer activa, emprendedora, inconformista y entusiasta, simplemente cambia el plan, pero no cambies la meta. Canaliza tu energía de forma inteligente, diseña un plan de acción lleno de sentido y define nuevas estretagias para lograr tus objetivos, lo que realmente quieres, lo que te aporta.
Al hilo de esta reflexión me planteé que al igual que yo, hay montones de mujeres a las que les gusta estar en forma, moverse, hacer cosas nuevas, relacionarse, viajar, en definitiva…VIVIR…hay un inmenso abanico de posibilidades enriquecedoras aún por descubrir.
Os propongo transformar ese deseo en algo que os entusiasme realmente, que os motive y que os haga sentiros bien con vosotras mismas. Acciones diferentes, que provoquen un resultado diferente, nuevas experiencias que amplíen vuestro campo de visión y la percepción de la realidad que teniais hasta ahora.